Tecnología y sostenibilidad impulsan el sector de la moda
Tras un año de profundos cambios, los minoristas del sector del retail de moda necesitan apostar por la diferenciación y adaptar sus tiendas a las nuevas expectativas de sus clientes en áreas como la tecnología, la moda sostenible y la omnicanalidad.
Como vimos en el post anterior del renacimiento de las tiendas físicas, estas se adaptan adoptando un papel de showroom en las que los clientes pueden ir a ver, a probar, a recoger pedidos del online o, incluso, a pedir online desde la misma tienda física para recibirlo en su casa si no quieren cargar con sus compras.
La tecnología digital ya no es solo un canal de venta adicional sino que se convierte en algo que condiciona la experiencia de compra y las interacciones entre la marca y el consumidor.
Las tiendas físicas siguen siendo muy importantes a pesar del aumento sin precedentes en las compras online de moda pero tienen que adaptarse a las nuevas necesidades de los consumidores y ofrecerles nuevas experiencias de compra.
En este contexto, hay algunas herramientas que pueden ayudar en ofrecer nuevas experiencias de compra en las tiendas físicas:
- Herramientas de recomendación de talla
Implementar una herramienta de recomendación de talla que guíe a los consumidores no solo mejora la experiencia de compra sino que reduce devoluciones y mejora la conversión. A pesar de ser un tipo de herramienta nativa del online cada vez son más las tiendas físicas que la implementan gracias a pantallas táctiles que permiten reducir el contacto con el entorno y evitar pasar por el probador si el consumidor no se siente cómodo con ello.
- Probadores virtuales
Cada vez son más los retailers que optan por la realidad aumentada. Varias marcas reconocidas a nivel mundial como Zara, Nike o Massimo Dutti fueron de los primeros en implementar esta herramienta en su estrategia para llevar al digital algo muy característico de la experiencia física y, en el caso de Zara, a nivel omnicanal con una versión en forma de espejos virtuales en sus tiendas.
Otro gran cambio que ha experimentado el sector de la moda es la creciente preocupación de los consumidores por la sostenibilidad. Los consumidores valoran los esfuerzos que hacen los minoristas y se sienten conectados con aquellos que ofrecen opciones más sostenibles.
Sostenibilidad y tecnología
Ser sostenible va más allá de usar fibras recicladas o de origen natural. Hay una parte muy importante de reducción del impacto hacia el medio ambiente que no podemos olvidar y, aquí, es donde entra en acción la tecnología.
Cada vez es más importante contar con una herramienta que permita analizar los datos de inventario de todos los canales de distribución para reducir excedentes y optimizar las producciones para que sean más sostenibles.
La moda es una de las industrias más contaminantes y el 70% de las emisiones de gas de efecto invernadero están directamente relacionadas con la producción. Optimizando el proceso y sabiendo qué necesitan los consumidores y dónde podemos reducir esta huella de manera significativa y, además, reducir costes.
Entender los datos y los cambios en el comportamiento de los consumidores hacia una mejora de la experiencia de cliente integrando la sostenibilidad en la estrategia serán las claves de la transformación del sector de la moda.
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