Cómo la omnicanalidad ayudará a los minoristas a conquistar la Generación Z
La omnicanalidad ofrece a los minoristas la posibilidad de llegar a sus clientes de forma más eficiente, a través de todos los canales, y en especial a los más digitales. Los millenials pueden haber sido los pioneros en comprar en el mundo digital, pero la primera generación que se ha criado en la era del móvil y las redes sociales está llegando a la mayoría de edad muy rápidamente.
Generación Z es el nombre que se da a los jóvenes nacidos entre 1990 y la actualidad. Constituyen una cuarta parte de la población de Estados Unidos (Sparks & Honey, 2014) y tienen un poder de compra estimado en 200 mil millones de dólares (Heller, 2015). En 2020, representarán el 40 por ciento de todos los consumidores en los Estados Unidos, Europa y el BRIC (Brasil, Rusia, India, y China).
En las economías en vías de desarrollo, donde la pirámide de la población tiene una base mucho más amplia, la Generación Z tendrá una influencia aún mayor en las estrategias de los minoristas.
Pueden comunicarse casi en su totalidad a través de clics y pantallas y la posibilidad de realizar compras online, para ellos, es una realidad. Entender mejor las necesidades de estos joveness será crucial para el éxito de cualquier minorista en la próxima década y más allá.
Superando el filtro de la Generación Z
La Generación Z ha tenido que adaptarse y aprender a evaluar y ordenar una cantidad enorme de información de forma rápida. Han aprendido a escanear imágenes, títulos, subtítulos y asuntos de mensajes hasta encontrar algo que les interesa.
Además, puesto que tienen una cantidad limitada de tiempo y energía para decidir si merece la pena invertir sus esfuerzos en algo, se fían de las páginas web, redes sociales y agregadores de contenidos de moda para encontrar, recoger y filtrar la información más popular o relevante para convertirla en algo más manejable.
La Generación Z también usa las redes sociales para construir su marca personal y profesional al mismo tiempo, ayudándoles a encajar a la vez que destacar. El uso de plataformas sociales y apps ofrece diferentes ventajas a los minoristas en relación a la Generación Z y ayuda a éstos a gestionar mejor sus marcas personales y profesionales.
Las webs de calificación/evaluación mejor adaptadas para registrar los comentarios de los clientes y permitir su interconectividad, por ejemplo, también actúan como validadores e influyen en las decisiones de compra. Los minoristas que ofrecen experiencias atractivas e inmediatamente beneficiosas son más propensos a superar los filtros y ganar la atención de la Generación Z.
Compradores más listos
Los miembros de la Generación Z son más ahorradores que sus predecesores Millenials, la mayoría de ellos habiendo visto el impacto económico del endeudamiento y la recesión en sus familias de primera mano. Ellos están acostumbrados a “venderse”, siendo menos probable que se dejen llevar por marcas llamativas o que muestren lealtad a una marca concreta. En su lugar, prefieren comprar ropa de un cierto estilo, o electrónica con las especificaciones adecuadas, a un precio asequible.
También, son muy pragmáticos. En una encuesta recientemente realizada por Ernst & Young, los adolescentes evaluaron el envío y entrega gratuita como la oferta comercial más importante de los minoristas, seguido por las rebajas y descuentos basados en sus preferencias, una política de devolución flexible y el acceso a los programas de compradores frecuentes.
Para atraerlos, las tiendas físicas tendrán que aprovechar sus canales online para crear una experiencia de compra flexible y sin complicaciones, que los miembros de la Generación Z podrán utilizar para crear sus propias marcas de forma fácil, creativa y rentable.